Bueno, después
de haber disputado la “Sanitas Medio
Maratón – Isla de la Cartuja”, puedo decir que sigo de una pieza. ^_^
Como ya sabes
mi chica me ha pegado su maldito resfriado y he tenido que correr como
buenamente he podido.
-“Pero… empecemos por el principio”-.
La Previa a la Carrera
Justo el lunes
de la semana de la carrera comencé a sentir un pinchazo agudo en la garganta
que se agravó el martes. El miércoles comenzó a remitir el dolor de garganta y
empecer a sentir una muy leve afonía que por suerte remitió el jueves.
Con todo esto
puedes imaginarte lo complicado que puede ser el sentirte física y mentalmente
para continuar con los entrenamientos correspondientes a la semana.
El viernes
comencé con el exceso de mucosidad por la garganta y estaba cada dos por tres
garraspeando. El sábado fue cuando hicieron acto de presencia la congestión
nasal y los mocos.
-“¡Que pedazo de semanaaa…!”-. *_*!!
Pues bien, con
todo y con esto, como no había tenido fiebre durante la semana, me presenté el
domingo para disputar la carrera. ^_^
-“Ya sabes, bicho malo…”-.
Crónica de la Carrera
Como la
carrera era a las 11:00AM, me levanté a eso de las 8:00AM para desayunar y
ponerme en marcha.
Salí a eso de
las 9 de la mañana para el estadio de atletismo de la Cartuja y aparque como a
unos cinco minutos del estadio.
Me eché la
mochila a la espalda y me dirigí a la puerta N del estadio, donde están los
guardarropas distribuidos por bloques numéricos de dorsales. Y esta vez iba
preparado para combatir el frío, porque dentro del estadio parecía que estaban
fabricando pingüinos. ^_^
Cerca de donde
tenía que dejar la mochila estaba uno de los vomitorios que dan acceso a las
gradas y por donde entraba el sol, así que me asomé y vi a un buen número de
participantes sentados por las gradas, a pleno sol; donde por cierto hacía una
temperatura bestial.
Así que como
iba sobrado de tiempo, me quedé por allí.
-“Algunas
veces me sorprendo a mí mismo cuando veo que no soy tan tonto. Otras veces no”-.
^_^!
Desde allí
hasta donde está ubicada la salida de la media maratón hay 15 minutos andando.
Así que como iba bien de tiempo, me quedé al solecito en el estadio hasta las
10:40AM.
Me quité la
ropa de abrigo en las gradas, dejé la mochila en el guardarropas asignado y
aproveché el recorrido hasta la meta para realizar el calentamiento y, me
sorprendió muy gratamente, ver que no fui el único en hacer lo mismo.
Ya en la
salida me puse lo más pegado posible a
la parte delantera del cuarto (y último) cajón de salida y procurando
que el sol me diera para evitar la sombra y la sensación de frío.
Después de
unos minutos que se me hicieron eternos, tomamos 6.000 corredores la salida y
ahí es donde empieza lo bueno.
Corriendo Voy…
Lo que me
sorprendió gratamente fue que la congestión nasal y la mucosidad me estaban
respetando. La temperatura y el aire fresco también influían en esa sensación
de bienestar para poder correr.
Así que empecé
a trazar el plan de carrera. ^_^
El primer
objetivo era alcanzar el kilómetro 10 de carrera en unos 50/55 minutos. Así que lo ideal era
rodar a una media de 5´20” el kilómetro y evitar quedar bloqueado por grupos de
corredores en los primeros compases de la carrera.
Las curvas del
recorrido eran prioritarias no tomarlas excesivamente por el interior ya que
con tanto “loco del running” suelto,
es muy habitual quedarse parado en el interior de las curvas. Así que las tomaba
por la parte del exterior. Sé que eso supone recorrer algunos metros de más,
pero como contrapartida no me quedo bloqueado por otros corredores y me permite
mantener la velocidad de crucero que me había impuesto.
Como también
sabía que mi estado anímico no es el óptimo con esto del resfriado y, que eso
juega en mi contra haciéndome pensar que estoy peor de lo que realmente estoy y
que desista de la carrera, la estrategia mental era efectuar carreras de 5 en 5
kilómetros.
-“¡Me autoengaño! Que tonto soy…”-. XD
El premio era
conseguir la botella de agua y el vaso de bebida isotónica para poder hacer la
siguiente carrera de 5Km. Y me ha funcionado de maravilla. ^_^
Nota: En el vídeo de la salida no vas a verme, pero me parecía interesante que puedas ver la salida ^_^ Vídeo: Corriendovoy.com
Nota: En el vídeo de la salida no vas a verme, pero me parecía interesante que puedas ver la salida ^_^ Vídeo: Corriendovoy.com
No es Oro todo lo que reluce…
A pesar de ir
controlando mi carrera con una precisión milimétrica y evitar situaciones en
carrera que me pudieran perjudicar, no he podido evitar quedar bloqueado
ligeramente en el primer punto de avituallamiento por culpa de esos corredores
que no se fijan en la existencia de más mesas de botellas y voluntarios
repartidos para facilitar la maniobra, ante lo cual me he mosqueado y no he
dudado en soltar a pleno grito al corredor que se me atravesó un:
-“¡No te pares delante hostias, que tienes
más mesas, sigue hostias, sigue!”-.
>.<!!
El pobre… dio un
bote de aúpa. No se lo esperaba. Y de inmediato nos disculpamos; él por
entorpecerme y yo por gritarle.
Otra cosa que
no tengo nada controlada es el beber en vaso las sales minerales.
-“Me las tomé hasta por las orejas”-.
Pero bueno, ya
se lo que no tengo que hacer. ;p
También me
revientan los “recortadores” de
esquinas.
Son esos
corredores que en lugar de tirar por donde deben en un giro, lo hacen por
encima de aceras, jardines, etc. En esos puntos conflictivos creo que debe de
haber jueces o miembros de la organización que sancionen con tiempos o
descalifiquen (por reiteración) a los tramposillos.
Igualmente
sigo sin comprender a aquellos participantes que sin estar realmente preparados
se embarcan en estas aventuras de las distancias de fondo.
-“Me explico”-.
En el
kilómetro 3,5 ó 4, oí como una corredora le decía a otra:
-“Vamos a tomarnos el primer gel para
aguantar”-.
“¡¡¿Perdona?!!” No llevas ni 15Km, ¿y ya estás pensando en
tomarte un gel?
Por cierto, ¿el
primero…?, ¿Cuántos llevarían?
Esto sólo
puede traer cosas malas y no a la larga. Si no se está preparado, no se está.
El año es muy largo y hay muchas carreras. Primero entrenas, después sigues
entrenando y si quieres pruebas con un 3000 o un 5000. Y a partir de ahí ya
veremos. No todo el mundo está preparado ni capacitado para afrontar con
garantías una media maratón ni una maratón (y me incluyo).
En fin,
volviendo a mi carrera, te contaré que en el kilómetro 16 me empecé a quedar
cortado del grupo con el que iba. Comencé a tener una leve molestia en la zona
lumbar y en la región del sacro, así que bajé el ritmo para ver si me
recuperaba.
Di un rápido
vistazo atrás y había un grupo que venía rodando fuerte, así que decidí
mantener la distancia con el grupo que me precedía y servir de referencia al
que se acercaba desde atrás.
Cuando me
alcanzaron me enganché al último y volví a incorporarme al grupo que me
precedía.
-“Estrategia pura para no rodar solo”-. ^_^
El Calvario
Todo lo bien
que iba todo se me esfumó de un plumazo cuando en el 18Km, la temperatura se
elevó un poco y la leve brisa fresca que nos había estado acompañando amainó
suavemente.
“Toc, toc!!
Somos la congestión nasal y los mocos. ¿Se puede pasar? ¿Sí?”.
Y correr con
la nariz inflamada no es aconsejable. Tampoco lo es el tener que estar
constantemente resoplando alternativamente por los orificios nasales para poder
evacuar la mucosidad y ver que no dan para más.
Cada kilómetro
era una batalla conmigo mismo y con un deseo enfermizo de parar y abandonar. Ni
siquiera me servía de consuelo el tener fijado en la mirada el estadio.
Lo peor de
correr en estas condiciones es que no eres capaz de tomar el aire que necesitas
para oxigenar las piernas y estas se vuelven pesadas como plomos, se pierde el
ritmo, te descentras, te desquicias y la distancia se vuelve un muro insalvable.
La llegada al
estadio por el túnel sur de acceso fue el revulsivo que necesitaba.
-“¡Aire, aire a raudales!”-.
Así que empecé
a ampliar la zancada buscando el ir cómodo y tragar todo el aire que podía por
la nariz y boca para poder entrar en la recta de meta lo más fuerte posible y
arrebatarle al crono alguna décima de las perdidas.
Tras la Línea de Meta
Justo al
cruzar la meta, mi prioridad era la de poder coger aire y respirar. La
sensación de inflamación nasal y el sentir la presión de los latidos por la
cabeza, sienes y hasta en las encías y dientes fue de lo más desagradable que
he experimentado al acabar una carrera.
Me quedé un
rato por la zona de llegada para recuperarme y, cuando lo había más o menos
conseguido, me retiré al interior de los túneles del estadio para buscar agua y
zumos.
Lo mejor: el
rato que pasé tumbado en la camilla de masajes.
-“Salí como nuevo”-. ^_^
Nota: Puedes verme a partir del segundo 36 de reproducción, por la parte derecha de la imagen. Camiseta roja, barbas, gafas de sol y dorsal 5275. También me verás tratando de coger aire tras cruzar la línea de meta. ^_^ Vídeo: Corriendovoy.com
Mis Resultados
Al final creo
que no ha estado del todo mal el resultado obtenido. Sobre todo teniendo en
cuenta las limitaciones que he tenido en los cuatro últimos kilómetros para poder coger aire y mantener un buen ritmo.
Primer clasificado Vet M35: 1h12´46"
Mi tiempo Vet M35: 1h55´15"
Puesto Vet M35: 876
Y os dejo también los splits de la carrera.
Primer clasificado Vet M35: 1h12´46"
Mi tiempo Vet M35: 1h55´15"
Puesto Vet M35: 876
Y os dejo también los splits de la carrera.
Nos leemos pronto!!
Eres un campeón, Jesús. Conseguiste llegar a meta con mocos y todo.
ResponderEliminarSe pasa muy mal cuando te falta el aire pero tu lo lograste ¡enhorabuena!
Un abrazo
Hola Erika!!
EliminarMuchas gracias!! Lo cierto es que tienes todo la razón, ¡que mal se pasa sin poder respirar!
Lo lógico es parar pero como soy un "insensato", decidí seguir jajaja
¡Estoy mu loco! XD
Un abrazo!!
Hola David!! ^_^
ResponderEliminarMuy cierto, lo más importante no es cómo se inicia una carrera, sino el cómo se acaba. ^_^
Y la próxima me da muuucho respeto. Pero habrá que acabarla (aunque sea a rastras) jijiji.
Un fuerte abrazo!! ^_^