Imagen: mindandmuscle.net |
Hola!!
Bueno, pues ya hemos pasado el ecuador del mes de Febrero
y, para cuando nos queramos dar cuenta veremos gente “llorando de alegría” por
la llegada de la primavera.
-“¡Pobrecit@s mis alégic@s! Todo el mundo ahí;
disfrutando de las florecillas, el campo… Y vosotr@s que parece que la gripe os
ha cogido cariño y no os suelta. ¡Ayyy!”-.
Si es que no todo el mundo en primavera es feliz…
-“En verano sí, ¡Eh puñeteretes…!”-. ;p
En fin, que mientras las hormonas y el polen se disparan
con la estación primaveral, hoy lo que te vengo a contar en el post es para qué
sirve el chisme este de la máscara de entrenamiento o training mask.
La training mask
Bueno, si no lo sabes te diré que es el chisme que ves al
principio del post y que lo ilustra.
En principio, las mascarás de entrenamiento te la venden
como un complemento o material deportivo encaminado a simular el entrenamiento
en altitud. Y gracias a esa simulación, mejoras el rendimiento deportivo ya que
es como si estuvieses en la alta montaña.
En realidad, la máscara de entrenamiento es una especie
de “bozal” con una serie de filtros que te permiten regular el paso del aire de
un modo más o menos restrictivo; dependiendo de la configuración que le
pongamos.
Y aquí, ¡Me mandan al palco!
Como te comentaba antes, nos la venden para que mejoremos
el rendimiento deportivo simulando que estamos en altitud. Cosa que no es del
todo correcto.
-“Te explico”-.
Una de las características de entrenar en altitud es, que
la concentración de oxígeno en el aire que respiramos es menor por estar más
disperso; por lo que tendremos que realizar un mayor esfuerzo respiratorio para
captar ese oxígeno del aire y, como resultado, nuestro corazón tendrá también
que someterse a un mayor trabajo para poderlo distribuir y extraer hacia los
pulmones el dióxido de carbono.
Por mucho que configuremos la máscara de entrenamiento,
lo que NO hace es disminuir la concentración de oxígeno en el aire que
respiramos. Pero sí, el dificultar el paso del aire.
Para lo que sí nos va a servir como una “mala bestia” es
para hacernos trabajar nuestro patrón respiratorio, ya que nos va a permitir
trabajar toda la musculatura implicada en ella, haciendo que, al tener esa
musculatura trabajada, nos resulte mucho más cómodo mantener una respiración
tranquila y profunda cuando corremos sin ella.
Por cierto, cuando trabajemos con ella es bueno siempre
haber probado en casa a superar la sensación de “asfixia” que provoca al
principio con ejercicios de control respiratorio. Y cunado esto lo tengamos ya
domado… entonces sí, a correr como Dark Vader en busca de Luck Skywalker.
-“¡A la! Ya está listo el post de hoy. Ves como no todo
es correr…”-. ;)
Nos leemos pronto!!
Tu sigue "dopándote" como si fueses Iván Drago, que yo en mi mejor estado de forma te sigo dejando atrás... 😋
ResponderEliminarMenos cachibaches y potingues y más trabajo de verdad 🤣🤣
Hola Dani!!
EliminarSerás cabrito!!! Lo que me ha dicho... 🤣🤣🤣
A ti no te alcanzo ni con la bici. Pero todo se andará hasta poderte alcanzar 😉