viernes, 24 de febrero de 2017

Running: Zurich Maratón Sevilla 2017

Imagen: Entrada a la Feria del Corredor


Hola!!

Ya hemos llegado casi al final de este mes de Febrero y, en él, hemos podido disfrutar de una de las mejores experiencias que podemos tener como corredores:

-“¡LA MARATÓN!”-.

Y como ya sabes, se trata de una prueba de fondo. La más especial y esperada de toda la temporada.

-“Al menos por mí”-. ;)

Y si te parece, te cuento todo lo vivido en torno a ella.


En la previa


En esta ocasión, voy arrancar la previa en el día anterior a la maratón; esto es, en el sábado.

Este día me fui hasta el Palacio de Congresos y Exposiciones “FIBES”, donde se ubica la feria del corredor y, en la que tenemos que retirar el dorsal, el cortavientos de New Balance, la bolsa del corredor y solicitar el pase para el almuerzo de la pasta (si es que te quedas a almorzar).

Así que llegué con tiempo más que de sobra para poder darme una vuelta y esperar a nuestro amigo Dani, que venía con toda la familia. La idea era recoger juntos todo el material y quedarnos al almuerzo.

Imagen: espacio New Balance


Mientras tanto, también estaba pendiente de poder localizar a Korta (del blog La Senda de Korta) que andaba ya por Sevilla, para conocerle en persona y desvirtualizarnos. También sabía que Manu (del blog A miscuarenta y…) venía de camino desde Madrid y también quería desvirtualizarlo. ^_^

De los dos, al final sólo he podido conocer en persona a Korta.

-“¡Que tío más grande! No sólo porque sea grande de estatura, sino porque es grande como persona que es lo que realmente importa. ¡Conocer gente de verdad; auténtica!”-. ^_^


Imagen: Korta (camiseta #TeamDeporr) y yo (el de las barbas)

Por supuesto inmortalizamos el momento.


-“Y Dani también. ¡Anda que se va a quedar atrás el tío! jajaja”-.


Imagen: Korta y Dani

En fin, que después de este encuentro en la dimensión real, y de pasar un rato sensacional en compañía de Dani y su familia, en el almuerzo de la pasta y en el rato que estuvimos en un bar cerca de FIBES, tocó volver a casa para descansar las piernas y prepararlo todo de cara al Maratón.


La Incertidumbre


Como los chicos del tiempo no dejaban de decir que nos íbamos a mojar toda la mañana del domingo, además de lo que me llevaría puesto para la carrera, dejé preparado una mochila con un buen arsenal de ropa para las diferentes posibilidades atmosféricas que se presentasen.


El Material


Para la carrera, y como es costumbre, tenía preparado lo siguiente en la mesa:

  • Camiseta Mizuno del proyecto de Korta “Un Ironman Contra el Cáncer.


-“Como sabes, para mí la maratón es una prueba muy muy especial. Así que la camiseta también tenía que serlo”-.

  • Guantes, mallas, gorra y perneras Coreevo.
  • Tubular New Balance.
  • Zapatillas Asics Dynaflyte FlyteFoam.
  • Calcetines Arch Max.
  • Cinturón Arch Max Belt Pro.
  • Reloj Suunto Ambit 2R y pulsómetro.
  • 4 geles de glucosa.
  • 2 geles de magnesio.
  • 2 pastillas masticables de sales minerales y vitaminas.
  • Smartphone con funda antigolpes (“¡Que me conozco!”)


Imagen: Material para la Maratón


El día de la carrera


El domingo comenzó a las 05:00 con la idea de desayunar tranquilo, espabilarme a mi ritmo y salir de casa a eso de las 07:00 para estar en el estadio sobre las 07:30.


El desayuno


En esta ocasión, para desayunar me he inclinado por:

  • Café con leche.
  • Manzana.
  • Plátano.
  • Copos de avena con proteínas sabor café frapé.
  • 500ml de agua con preparado de hidratos de carbono, creatina y magnesio.



En el estadio


Una vez que dejé el coche aparcado junto al estadio, me dirigí a la puerta “N” del estadio, que es donde está el guardarropas y donde había quedado con Dani.

Lo cierto es que desde que te bajas del coche, el ambiente a maratón se respira y hay gente por todos lados, con lo que las ganas de que esto arranque aumentan hasta límites insospechados.

Dentro ya del estadio, me dio por asomarme a través de uno de los vomitorios al estadio para verlo iluminado estando aún vacío de público.

-“Es un momento mágico. Ahí se para el tiempo y todo el murmullo del gentío se disipa. Es cundo puedes apreciar la magnitud y grandiosidad que encierra en sí misma la pista y el atletismo”-.


Imagen: Vista del estadio cuando aún duerme


También es cuando te fijas en la pista y ves el estado deplorable en el que se encuentra; se te cae el alma al suelo y te da un pellizquito en el corazón.

-“¿Cómo se puede ser tan cruel con la pista que ha acogido un Campeonato del Mundo y que ha visto tantos y tan buenos atletas volando sobre ella?”-.

Y después del momento íntimo con el estadio me fui a buscar a Dani; aunque fue él quien me encontró a mí.

Dejamos los trastos en el guardarropa y nos fuimos para el cajón tranquilamente mientras iniciábamos un calentamiento muy muy suave.


La Carrera


La estrategia


Habíamos planteado salir lo más pegado posible al globo de las cuatro horas de carrera, ya que éste lo iban a portar miembros del equipo del Club Atletismo Orippo de Dos Hermanas, del que Dani es miembro. Por lo que rodaríamos con gente conocida y que seguro nos animarían durante la carrera.

Deberíamos ir con ellos gran parte del recorrido; al menos hasta el PK32 ó PK35 y, si nos veíamos bien, comenzar a atacar para tratar de llegar en algo menos de esas cuatro horas.

La realidad


Bueno, pues… "¡nuestro gozo en un pozo!"

Nos habíamos situado bien dentro de los cajones, pero tras el pistoletazo de la salida y sin haber pasado aún por el arco de la salida, vimos a todos los globos salir a la vez y muy, muy lejos de donde estábamos nosotros.

-“Ya te puedes imaginar la cara de bobo de los dos al ver la situación”-.

Así que tocó sacar la calculadora mental y tranquilizarnos.


Estableciendo el rumbo


Con los primeros compases de la carrera, empezamos a hablar entre nosotros y llegamos al acuerdo de establecer un ritmo de 5´40”, ya que era el que teníamos preestablecido para ir con el globo de la gente del Orippo.

Así que tendríamos en breve a tiro el globo de las cuatro horas y media. Y el de las cuatro horas y cuarto lo tendríamos que cazar sobre el PK8 y como muy tarde en el PK10; pero nunca antes.

-“Y la primera parte de la cacería la bordamos. En el PK8 ya estábamos al acecho del globo de las 04h15´00””-.

Imagen: Dani y yo en modo "Hammer Time"


Ahora podíamos “relajarnos” ya que manteniendo un ritmo entre 5´30” y 5´40” el paso por el kilómetro, tendríamos que ver al globo de las cuatro horas entre el PK21 y el PK25. De tal modo que nos tendríamos que poner a su altura sobre el PK30. Y de ahí, mantenerlo hasta el PK38, para ver si somos capaces de comenzar a adelantarlo o no.


Perdona, ¿Has visto un globo amarillo?


Sí… resulta que en la larga recta de la Ronda del Tamarguillo; en el que se alcanza el PK25, no había ni rastro del globo.

-“¡No nos lo podíamos creer! ¡¿Pero dónde coj… está el puñetero globo de las 04h00´00””?!”-. O.O!!

En ese momento decidimos que lo mejor era olvidarse del globo de las narices y seguir con el ritmo fijado. Un poco más adelante nos encontramos con una chica del Orippo a la que Dani le preguntó por el dichoso globo.

Su respuesta nos hizo mirarnos una vez más con cara de incrédulos novatos.

-“¡¿El globo?! Van a un ritmo inferior a las cuatro horas. A mí me han desfondado. Me han sacado de punto. No sé a qué juegan. Olvidaros de ellos porque van más rápido”-. O.O!


Mándame una postal


Llegados al PK28, le comenté a Dani que lo duro comenzaría en un par de kilómetros; en el PK30. Y que llegados a este punto volvería a sacar el móvil para grabar la bienvenida oficial a la maratón.

Para cuando me quise dar cuenta, sobre el PK29, Dani me sacó unos metros, me miró y le hice un gesto de “¿A dónde vas? Tranquilo”. Pero esa reacción me la conozco. Es cuando se siente fuerte y decide tirar hacia delante con todo.

Así que poco a poco comencé a perderlo de vista y me quedé sólo.

Recuerdo haber pensado que se equivocaba tirando tan pronto, pero sé que es una mala bestia y si se siente no lo paras ni con un tanque. Sólo me quedó desearle una cosa: “mucha suerte y espero que te acompañen las fuerzas ¡Ánimo!”.


Una bocanada de aire


Justo al pasar el PK35 y antes de adentrarnos en la Plaza de España del Parque de María Luisa, vi a una ambulancia con personal sanitario que disparaba Réflex a todo aquel que se lo pidiese. Me dirigí a uno de ellos y mientras seguía trotando le pedí un chorreón entre los omóplatos.

Me dolía a rabiar desde el PK33 y no quería que interfiriese en el braceo o que me dificultase la postura y la respiración. Y en cuanto me roció el trote en estático se convirtieron en zancadas.

Imagen: Plaza de España PK35


Pirata pata palo


A partir del PK37 comenzó mi particular calvario con el basto interno del cuádriceps derecho

En nada pasó de ser una sensación de pesadez a una rigidez que me impedía correr con cierta solvencia, hasta acabar con la imposibilidad de apoyar correctamente porque la propia función de estabilización de la pierna me dolía.

En el PK38.6 tuve que pararme para masajearlo y soltarlo. El remedio duró poco y adentrado ya en el PK39 tuve que volver a pararme para volverlo a soltar y estirarlo.

Volví a emprender la marcha de un modo bastante conservador y con ritmos por encima de 6´00”. Iba a tirones.

Imagen: Paso por el PK37. ¡Toca sufrir!


¿Cuánto mide un kilómetro?


El PK40 se me hizo eterno. He descubierto el significado de “la soledad del corredor de fondo”.

Iba tan contrariado y tan fuera de ritmo que lo más sensato era continuar, pero andando, tratando de calmar la mala leche que me había entrado. Me enfoqué en calmarme mentalmente y dejar de negar con la cabeza mientras trataba de no focalizar mi ira en la pierna derecha.

Cuando me había calmado un poco volví a trotar con las pocas fuerzas que ya quedaban y el objetivo se había convertido en llegar; simplemente eso, llegar.


Tras la línea de meta


Una vez que acabas la carrera te relajas. Pero en esta ocasión lo hice con una gran sensación de haber fracasado estrepitosamente.

-“Sé que no es así, que alcanzar la meta de una maratón no está al alcance de todos y, volver a hacerlo por segunda vez, es para estar muy orgulloso. Pero en ese preciso instante lo que me repetía era que había tirado por tierra todo el trabajo de estos cinco meses atrás.”-.

Busqué a Dani que estaba junto a los voluntarios que te entregan la medalla a la vez que te regalan la mejor de las sonrisas y te felicitan por haber llegado, y le dije que estaba roto, que necesitaba sentarme un momento para recuperarme.

-“¡Jo, qué grande es Dani! Se fue a buscarme uno de los plásticos que da la organización para evitar que cogiese frío y me ayudó a levantarme”-.

Imagen: Llegada al arco de meta


¿Hay un médico en la sala?


Cuando nos íbamos para la zona de los avituallamientos que hay dentro del estadio, le hice saber a Dani que no me encontraba bien. Había comenzado a sentirme un fuerte hormigueo en las manos, en los laterales del abdomen y en la barbilla. Así que nos dirigimos a los servicios médicos.

Lo que me sucedía era que estaba bajo de glucosa en sangre. Así que me tomaron una vía para ponerme lo que me faltaba y oxígeno para facilitar el proceso.

-“Visto así parecía que iba a un quirófano, ¡qué mal yuyu!”-.

En cuanto los niveles de glucosa se normalizaron ya me encontraba bien y el hormigueo desapareció; sin embargo, al sentarme nuevamente en la camilla, el gemelo izquierdo se me subió y tuvo que venir el fisioterapeuta a poner un poco de orden entre tanto cachondeo muscular. ^_^!!

Imagen: foto a "traición" de camino al SAMU


Al final del túnel


Pues al final del túnel esta la salida del estadio por donde peregrinan todos los maratonistas ataviados con su plástico azul.

Me reuní con Dani nuevamente en el guardarropa y desde allí nos fuimos a buscar a su mujer y a los críos que estaban viendo llegar a más corredores.


Las Claves del No Éxito en la Maratón


Después de darle algunas vueltas a la cuestión de la última parte de la maratón, creo que el no haberla terminado correctamente ha sido debido al sistema de preparación que he decidido llevar a cabo.

Si para el pasado año lo basé todo en sesiones donde se incrementaba la distancia de los rodajes largos de los domingos; oscilando entre los 20 y los 28 kilómetros, llegando incluso a los 32 kilómetros en alguna ocasión. Y trabajar muy poco las series y bastante los cambios de ritmos al final de las sesiones.

Este año he optado por realizar sesiones donde las series han sido las reinas y los rodajes no han sobrepasado los 120 minutos en ningún caso.

Esta forma de entrenarla ha provocado que mi cuerpo no haya sido capaz de utilizar de modo eficiente otros recursos energéticos y hayan agotado el glucógeno muscular (de ahí los calambres), a pesar de haber sido muy escrupuloso en la toma de los geles y de los avituallamientos. A esto le voy a sumar que en el bolsillo del cinturón donde llevaba las pastillas de sales minerales, guardé los guantes y me olvidé por completo de ellas.

-“¡Qué cabecita la mía…!”-.

Lo que sí me ha aportado es la capacidad de mantener un ritmo constante de carrera durante toda la prueba. Así que creo que ya sé como debo de enfocar correctamente el planteamiento de los entrenamientos para la próxima maratón, que será el próximo 25 de Febrero de 2017.


Mis Resultados


Imagen: SportManiacs

Con respecto a la marca de la pasada edición, en esta ocasión he conseguido bajarlo en 15´13".

Y para terminar este mega post maratoniano te dejo el vídeo de la misma. ^_^




Nos leemos pronto!!

2 comentarios:

  1. Al margen de poner mi impresión sobre todo, que lo haré más adelante solo te diré que tu entrenamiento no ha sido muy diferente del mio y que creo que el hacer tiradas largas de más de 120' no es efectivo. No creo que el entrenamiento sea una causa sobre todo cuando has bajado 15' con respecto al año pasado.

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    1. Hola Dani!!

      Jajaja, eso de "poner tu impresión sobre todo" suena casi a amenaza, jajaja.

      ¡Es broma, es broma! ^_^

      ¡Uf!, pues no sé chico... el pasado año esas tiradas largas me vinieron geniales de cara al tan temido muro.

      Y la climatología no ha sido un factor clave, porque el año pasado hizo hasta cierto calor y, en esta ocasión, el día ha estado fantástico.

      Si la cosa es como comentas, entonces lo único que se me ocurre es que puede que me haya pasado factura los días previos a la maratón donde he estado algo resfriado...

      Pero vamos, no había acabado una carrera así en mi vida. ¡Que asco acabar así! Aunque hubo gente por las instalaciones del SAMU que habían llegado en un estado verdaderamente lamentable.

      Bueno, pues me quedo tranquilamente tirado en el sofá este fin de semana esperando tu impresión sobre tu primera Maratón. ^_^

      ¡Felicidades por acabar tu primera Maratón!

      El año que viene a por más y a por el joío globo de las 4 horas. ;)

      ¡Un abrazo! ^_^

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