viernes, 16 de febrero de 2018

Running: Entrenando con Vader

Imagen: mindandmuscle.net



Hola!!

Bueno, pues ya hemos pasado el ecuador del mes de Febrero y, para cuando nos queramos dar cuenta veremos gente “llorando de alegría” por la llegada de la primavera.

-“¡Pobrecit@s mis alégic@s! Todo el mundo ahí; disfrutando de las florecillas, el campo… Y vosotr@s que parece que la gripe os ha cogido cariño y no os suelta. ¡Ayyy!”-.

Si es que no todo el mundo en primavera es feliz…

-“En verano sí, ¡Eh puñeteretes…!”-.  ;p

En fin, que mientras las hormonas y el polen se disparan con la estación primaveral, hoy lo que te vengo a contar en el post es para qué sirve el chisme este de la máscara de entrenamiento o training mask.


La training mask


Bueno, si no lo sabes te diré que es el chisme que ves al principio del post y que lo ilustra.

En principio, las mascarás de entrenamiento te la venden como un complemento o material deportivo encaminado a simular el entrenamiento en altitud. Y gracias a esa simulación, mejoras el rendimiento deportivo ya que es como si estuvieses en la alta montaña.

En realidad, la máscara de entrenamiento es una especie de “bozal” con una serie de filtros que te permiten regular el paso del aire de un modo más o menos restrictivo; dependiendo de la configuración que le pongamos.


Y aquí, ¡Me mandan al palco!


Como te comentaba antes, nos la venden para que mejoremos el rendimiento deportivo simulando que estamos en altitud. Cosa que no es del todo correcto.

-“Te explico”-.

Una de las características de entrenar en altitud es, que la concentración de oxígeno en el aire que respiramos es menor por estar más disperso; por lo que tendremos que realizar un mayor esfuerzo respiratorio para captar ese oxígeno del aire y, como resultado, nuestro corazón tendrá también que someterse a un mayor trabajo para poderlo distribuir y extraer hacia los pulmones el dióxido de carbono.

Por mucho que configuremos la máscara de entrenamiento, lo que NO hace es disminuir la concentración de oxígeno en el aire que respiramos. Pero sí, el dificultar el paso del aire.

Para lo que sí nos va a servir como una “mala bestia” es para hacernos trabajar nuestro patrón respiratorio, ya que nos va a permitir trabajar toda la musculatura implicada en ella, haciendo que, al tener esa musculatura trabajada, nos resulte mucho más cómodo mantener una respiración tranquila y profunda cuando corremos sin ella.

Por cierto, cuando trabajemos con ella es bueno siempre haber probado en casa a superar la sensación de “asfixia” que provoca al principio con ejercicios de control respiratorio. Y cunado esto lo tengamos ya domado… entonces sí, a correr como Dark Vader en busca de Luck Skywalker.

-“¡A la! Ya está listo el post de hoy. Ves como no todo es correr…”-.   ;)


Nos leemos pronto!!

2 comentarios:

  1. Tu sigue "dopándote" como si fueses Iván Drago, que yo en mi mejor estado de forma te sigo dejando atrás... 😋

    Menos cachibaches y potingues y más trabajo de verdad 🤣🤣

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    1. Hola Dani!!

      Serás cabrito!!! Lo que me ha dicho... 🤣🤣🤣

      A ti no te alcanzo ni con la bici. Pero todo se andará hasta poderte alcanzar 😉

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